JD Vance se reúne con víctimas del tiroteo en la escuela de Minneapolis

El vicepresidente JD Vance visitó a las familias afectadas por el tiroteo en la escuela católica Anunciation en Minneapolis, Minnesota, que cobró la vida de dos niños y dejó varios heridos.

«Nunca he tenido un día que me quede tan grabado en la memoria como este, porque realmente sentí que estos padres, en medio del peor dolor de sus vidas, me abrieron sus vidas, me abrieron sus corazones y me hicieron parte de ello», dijo el vicepresidente, en una rueda de prensa después de hablar con los familiares de las víctimas.

Vance, católico practicante y padre de tres hijos, también envió un mensaje en nombre de los padres cuyos hijos murieron o resultaron heridos en el tiroteo. Mencionó específicamente a Lydia Kaiser , quien permanece hospitalizada: «Si les gusta orar, oren por esta niña inocente que está siendo operada ahora mismo, para que baje la inflamación y se recupere».

Hasta el jueves por la tarde, una campaña de recaudación de fondos en GoFundMe para cubrir los gastos médicos de Kaiser había acumulado casi $350,000 en donaciones.

JD Vance lamentó que gran parte de la atención esté centrada «en el brutal maníaco que disparó en esta escuela y no lo suficiente en los niños inocentes que perdieron la vida y estaban llenos de vida», dijo.

El vicepresidente prefirió hablar de Harper Moyski, de 10 años de edad, una de las víctimas asesinadas en el tiroteo. «Una hermosa joven» con una «hermosa sonrisa» que «convertía un mal día en uno bueno», describió.

La autoridad instó a los padres estadounidenses a «asegurarse de abrazar fuerte a sus hijos porque hay familias en Minneapolis que no podrán hacerlo nunca más», recalcó.

Vance ha opinado sobre la tragedia varias veces durante la semana y sobre la importancia de la oración. Después de que la exsecretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, publicara en redes sociales que «orar no es suficiente», Vance rechazó su análisis en una respuesta. «Oramos porque tenemos el corazón roto», afirmó. «Oramos porque sabemos que Dios escucha».

Oramos porque sabemos que Dios obra de maneras misteriosas y puede inspirarnos a actuar. ¿Por qué sienten la necesidad de atacar a otras personas por orar cuando acaban de matar a niños orando?, preguntó.

La tragedia en Minneapolis coincide con la publicación de un informe por parte del Consejo de Investigación Familiar, una organización evangélica sin fines de lucro y grupo activista que identificó 1.384 incidentes de hostilidad contra iglesias estadounidenses entre enero de 2018 y diciembre de 2024.